jueves, 27 de agosto de 2009

AHORA O NUNCA

Este es el titulo de una película que yo creo que ya he visto cerca de cinco veces. No recuerdo si se estreno hace uno o dos años. La película cuenta la historia de dos enfermos terminales de cancer que tras luchar y ver que les queda un año a lo sumo, deciden hacer una lista de cosas que les gustaría hacer antes de morir... Os la recomiendo. Parece mentira que os recomiende una película que encima habla mas de la enfermedad, pero a mi me ha conmovido cada vez que la he visto, la ultima vez hoy. Y no por saber cual es el final, sino por la actitud con la que hay que enfrentar la enfermedad. En muchos he leído que eso es lo primordial, la actitud, por eso os la quiero recomendar. Tanto a los que estamos enfermos, como a los que no. A los que si, nos ayudara a tener esa buena actitud, y a los que no tienen la enfermedad, pues que sepan que no somos superhombres, pero que en el fondo lo que nos une, son las ganas de vivir.

Quiero reproducir las primeras palabras con las que empieza la película: "Es difícil medir el valor de la vida de una persona. Para algunos se mide por los seres que deja atrás, para otros se mide por la fe, para otros por el amor. Para otros la vida no tiene ningún significado. Para mi, yo creo que uno se mide por aquellos que se han medido por el. Lo que puedo asegurarles es que, se mida como se mida, Edwar Cole, (el protagonista), vivió mas durante sus últimos días en la tierra, que la mayoría de la gente en toda una vida. Sé que murió con los ojos cerrados, y con el corazón abierto."

Es curioso pero alguna vez ¿hemos echado una mirada atrás para ver el bien que hemos hecho?. ¿Cómo hemos pasado por la vida? ¿Cómo se nos va a recordar, o queramos que nos recuerden?. Al inicio de cada año hacemos propósito de que vamos a renovarnos, que los fallos que cometimos no se repetirán, que el daño que hicimos, no lo haremos de nuevo. Es curioso, te dice que tienes cancer y lo que se te pasa por la cabeza, lo primero es la muerte. Sabemos que con los avances de hoy, esto ya no es del todo real. Los casos de supervivencia son altísimos. Yo por mi profesión no es la primera vez que me he encontrado con la muerte, he visto como gente buena moría, y gente no tan buena, pero al final siempre hay detalles por los que se les recuerda.

Mucha gente comenta en sus blogs que el día que terminaron con el tratamiento ese día volvieron a nacer. Ese día empezó a ser el año 0, ese día empiezan a ser una nueva persona, por que la vieja, se fue con la quimioterapia. Y yo les creo. No debe de ser fácil pasar día a día por ahí. Ese día valoras hasta lo mas insignificante. Yo a partir del lunes lo descubriré. Yo hace dos años aprendí a valorar mi vida, cuando estuve a punto de perderla, y sin embargo dos años después se me había olvidado. Había vuelto a pasar otra vez. Pero el cancer se ha encargado de recordármelo otra vez. Y creo que esta vez no se me olvidara.

No voy a entrar en el por qué yo. Considero que es una pregunta estúpida. El desear que le pasase al vecino ¿acaso iba a hacerme sentir mejor?. Quizá la gente que nos quiere, después de esta desagradable noticia se pregunte que por qué a mi hermano, padre, hijo, esposo...etc. Pues yo te lo contesto, por que si. Y no hay mas. Te ha tocado y ya está. Para que pensar más, no nos va a aliviar. Ahora agarrate los machos y lucha y demuestrate que puedes con eso...y con mucho mas. Es eso lo que al final nos va a hacer que salgamos adelante y la superemos.

No quiero olvidar las palabras de apoyo que he recibido en tan pocas horas de familia y amigos. Y también quiero agradecerte a ti María Antonia Valdivieso por haberme hecho abrir los ojos con el email que me contestaste. El tuyo fue el primer blog que leí y como te dije me quede sorprendido de la entereza y fortaleza. Ojala después de cada chute me pueda también ir de viaje...jajaja. Y también me ha impresionado la fortaleza de Dulos, y encima poniendo fotos de las fases. No se si yo llegare a tanto, aunque si que espero tener la fortaleza necesaria para al menos poder contarlo.

1 comentario:

  1. Hola. Soy Anita, la mujer de José María. Quiero aprovechar su idea d escribir en el blog para contar, a mi manera, el punto de vista desde fuera, de lo que nos ocurre a los que estamos al lado de una persona enferma de cáncer. No es nada fácil, aunque está claro que el que se lleva la por parte es el enfermo. Ese nudo en el estómago cuando te dan la noticia, las noches sin dormir pensando, más que el qué pasará, si va a sufrir, si tendré fuerzas para apoyarlo y darle el ánimo que necesita y se merece, si seré capaz de hacerlo bien... Me gusta leer lo que mi marido escribe, porque me da una idea de cómo se siente. Él no es muy comunicativo, nunca lo ha sido, supongo que porque desde muy pequeño le ha tocado buscarse la vida lejos de su familia. Y ahora, en este momento, entiendo que se aísle un poco y no le apetezca hablar mucho, al menos cara a cara. Supongo que necesita su tiempo y ya se le pasará. En este momento él prefiere compartir lo que le pasa con vosotros, que al fin y al cabo habéis pasado por lo mismo que él. Y yo lo comparto con él y con vosotros a través del blog.
    No sé cuántos de vosotros seréis creyentes, pero yo y mi marido lo somos, y, amén de confiar en los tratamientos y en los médicos que lo tratan, confiamos en Dios, y eso es una gran ayuda. Yo siempre lo he sentido en los momentos difíciles que he pasado, y siempre he tenido fe, aún en momentos en los que todo parecía estar en contra. Por ejemplo, hace un año y medio, más o menos cuando a José le detectaron el tumor testicular, debía operarme de miomas uterinos que habían crecido hasta medir más de 15cm. Ya perdimos un bebé a causa de estos miomas, y el médico no tenía muchas esperanzas de poder salvar mi útero. Y sin embargo, algo me decía, como ahora que mi marido se enfrenta de nuevo con la enfermedad, que todo iba a salir bien. Y así fue. Ni el médico podía creerlo, pero mi útero se recuperó y, cuando pase todo esto, mi Josito, como yo le llamo, y yo tendremos un bebé y la vida seguirá, afortunadamente.
    Para concluir, quiero deciros que me ha gustado leer vuestros blogs y las cosas que contáis, Y quiero daros las gracias por ello. Y también lo que escribes tú, mi amor. Sabes que estoy contigo y por eso me casé, en la salud y en la enfermedad, recuérdalo. Sabes que todo lo que te ocurre es como si me ocurriese en mi propio cuerpo y que lo vamos a superar juntos. Te quiero, cariño. Un saludo a todos.

    ResponderEliminar